Con una superficie de 13,5 millones de kilómetros cuadrados, el también llamado sexto continente aparece dividido geográficamente por las Montañas Transantárticas, en Antártica Oriental -más antigua geológicamente- y Antártica Occidental. Esta última, que comprende precisamente la Antártica Chilena, incluye un sector continental que, bajo la forma de una península avanza hacia la extremidad austral sudamericana, prolongando la Cordillera de los Andes; y un sector archipelágico, Shetland, Orcadas, Sandwich del Sur, y otras islas, quedando separada de ella por solamente los aproximadamente 990 kilómetros del paso Drake.
Visto desde un satélite, este vasto continente se aprecia cubierto de una gruesa capa de hielo, acumulado allí por milenios. Por ello, la altitud promedio en la gran meseta central, es de 1.680, metros. Su cumbre más elevada es el monte Vinson, (4.897 metros) de la Cadena Centinela o montes Ellsworth.
Antártica mantiene en su ámbito el 70 por ciento del agua del planeta, o dicho de otra forma, el 90 por ciento de todo el hielo.
Obviamente, el hielo constituye el elemento más típico del paisaje antártico, este grueso y pesado manto se desliza con lentitud desde el centro de la meseta hacia la periferia. Más allá de la costa, la masa helada forma extensas «barreras» o bien se desprende de los glaciares transformándose en gigantescos témpanos (o icebergs) que flotan a merced de las corrientes marinas y fuertes vientos.
El mar que circunda la Antártica, conocido como Océano Austral, se congela entre marzo y septiembre aproximadamente. Su plataforma rocosa continental es estrecha -con 30 Km. de promedio- y cuatro veces más profunda que en otros continentes, debido quizás al enorme peso del hielo costero.